Como curar las heridas del caballo. Parte I
Una herida simple puede definirse como una pérdida de continuidad de la piel. Según este concepto uno puede imaginarse gran variedad de alteraciones capaces de producirlas. Para una mejor comprensión clasificamos las heridas en:
1- Heridas simples de la piel
2- Heridas lacerantes con daño de los tejidos profundos
3- Heridas punzantes
En una herida simple provocada por el bisturí del cirujano, la piel está libre de gérmenes porque este fue esterilizado, de este modo, el proceso de cicatrización de la herida se hará sin ningún problema, de la siguiente manera:
Los vasos exudan linfa que coagula sobre la superficie de la herida, formando una capa que mantiene adheridos los labios de la misma. Los leucocitos contenidos en la linfa, eliminan los tejidos muertos y dañados. Células derivadas del tejido conectivo forman desde los bordes de la herida. Este nuevo tejido puede contraerse y en la medida que lo hace aproxima los bordes. En la superficie comienzan a desarrollarse células que cubren la herida, completándose el proceso en alrededor de una semana.
Tratamiento
El tratamiento variará según el tipo y la ubicación de la herida. El método general de la lucha está dirigido a la asistencia de las funciones normales de reparación del propio organismo, a través de:
a) Asegurar un drenaje adecuado.
b) Favorecer el flujo sanguíneo que aporta el suero curativo para la reparación de los tejidos lesionados y los leucocitos necesarios para destruir las bacterias.
c) Combatir la infección y prevenirla.
d) Evitar el daño a los tejidos sanos.
e) Permitir que la herida reciba la mayor cantidad de aire compatible con cicatrización.
Ésta técnica estimula a cada una de las reacciones naturales de la cicatrización.
La herida debe liberarse de todo cuerpo extraño y coágulo sanguíneo. Sobre ,a herida puede aplicarse una pieza de grasa embebida en esta solución, manteniendola con un vendaje liviano, dejándola colocada por 24 hs. Si se dispone de un polvo antiséptico se lo puede utilizar o también solución de acriflavina. Siempre es aconsejable realizar el vendaje sobre una capa de algodón con el objeto de distribuir unifomemente las presiones sobre la herida y de que cualquier hemorragia pueda detenerse por coagulación en la malla de algodón.
Cuando se retire el apósito se observará, recubriendo a la herida, una masa amarilla y pegajosa. Ella corresponde a la linfa y debe eliminarse cuidadosamente por medio de torundas de algodón, se embebe nuevamente con la solución y se vuelve a cubrir como se emocionara.
Cuando se procede al lavado de la herida aparecen varios puntos hemorrágicos, hecho que debe interpretarse como buen augurio. Una vez reemplazadoel tejido que se perdió con la herida por tejido de granulación, debe aplicarse una curación seca con el objetivo de coagular la linfa y controlar el desarrollo de este nuevo tejido.
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